La gran variedad de atracciones únicas para todos hacen del país caribeño el destino perfecto para las familias.

Conocida por su amplia variedad de alojamientos y atracciones turísticas, República Dominicana sigue siendo uno de los destinos del Caribe más populares para las familias, pues tiene algo que ofrecer a grupos con cualquier tipo de interés o presupuesto.

El país sigue creciendo en popularidad como una opción para los viajeros multigeneracionales, gracias en parte al aumento del número de vuelos directos desde muchas de las principales ciudades de Estados Unidos, que lo  convierten en un destino conveniente. A lo largo de las casi 1.609 kilómetros de costa de República Dominicana, las familias podrán encontrar alojamientos y actividades que se adaptan perfectamente a sus necesidades. El país ofrece una amplia gama de hoteles y complejos turísticos específicamente diseñados para las familias y muchos de ellos son todo incluido, lo que los convierte en lugares ideales para aquellos que quieren todas sus comidas, bebidas y entretenimiento por un precio fijo, conveniente y asequible.

“Los hoteles y turoperadores de República Dominicana han perfeccionado sus ofertas de viajes multigeneracionales y se han anticipado a las necesidades de los grupos familiares para satisfacerlas mejor”, dijo Magaly Toribio, asesora de marketing para el Ministerio de Turismo de República Dominicana. “No importa la edad de los visitantes a nuestro país, todos encontrarán algo perfecto para sus intereses, niveles de actividad y presupuestos”.

Todo incluido para todos 

Para los grupos que buscan una experiencia “todo incluido”, el país ofrece resorts ganadores de premios; La Romana, Punta Cana, Puerto Plata, Samaná y otros ofrecen resorts todo incluido inspirados en el sabor único de cada región. Punta Cana, el destino más conocido de República Dominicana, les ofrece a los grupos multigeneracionales algo en lo que todos pueden estar de acuerdo: playas increíbles. Las aguas azules de la costa este que bañan las arenas blancas de la zona, salpicadas de una gran variedad de hoteles y resorts orientados a las familias, ofrecen diversión para los visitantes de todas las edades. Muchos de los alojamientos de esta zona tienen clubes infantiles de alta calidad y excursiones especialmente diseñadas para niños, así como spas, campos de golf de diseñador, clubes nocturnos y más para los adultos, por lo que es uno de los mejores destinos en el Caribe para las vacaciones familiares. Las ofertas de excursiones de Punta Cana por fuera de los resorts van desde natación en cenotes, encuentros con delfines, parasailing y zipline o tirolesa a la luz de la luna, hasta excursiones educativas de un día a la histórica Santo Domingo, recorridos por el campo de Punta Cana, buceo de poca profundidad en las islas del litoral de La Romana y más.

Aventuras que te llenan de adrenalina

Con nueve zonas ecológicas, República Dominicana ofrece una amplia variedad de terrenos para muchos tipos de actividades de aventura, con la costa norte y la península de Samaná como las más populares, históricamente. Puerto Plata, en la costa norte, es un destino activo especialmente adecuado para familias y grupos multigeneracionales amantes del deporte y la aventura. Las agitadas aguas del Atlántico a lo largo de la costa hacen de las playas de Puerto Plata el escenario perfecto para los aficionados a los deportes acuáticos de todas las edades; la ciudad de Cabarete es conocida como “la capital de kiteboarding del mundo”. Los que buscan un viaje de un día en Puerto Plata pueden visitar parques que ofrecen de todo, desde zipline hasta interacciones con los pequeños monos nativos, o llevar a los adolescentes en excursiones de barranquismo, rappel o cuatrimotos por la diversa geografía natural de Puerto Plata. Otros destinos populares de aventura incluyen la región montañosa de Jarabacoa, que ofrece acceso al pico más alto en el Caribe y a uno de los mejores raftings de la región.

Ecoturismo emocionante

La gran diversidad ecológica del país lo convierte en un refugio para los grupos multigeneracionales que buscan reconectarse con la naturaleza y admirar la flora y la fauna del Caribe. Las áreas como Jarabacoa, Constanza, Bayahíbe y Samaná ofrecen una clara idea de la belleza natural de la isla. La península de Samaná en la esquina noreste del país es una zona mayormente virgen; es ideal para viajes ecológicos y proporciona oportunidades para que las familias tengan una estadía tranquila y relajada en el Caribe. La zona tiene algunos de los mejores resorts y restaurantes de mariscos de la isla, ubicados entre calas y bahías privadas, y se especializa en las actividades en medio de la naturaleza. Las familias encontrarán mucho para explorar allí, como las 618 millas cuadradas de cuevas, manglares e islotes en el famoso Parque Nacional de Los Haitises, las miles de ballenas jorobadas que invernan en la Bahía de Samaná, o un refrescante chapuzón después de una buena sesión de senderismo en la piscina del impresionante salto El Limón. En la esquina opuesta de la isla, en el suroeste, la provincia de Barahona ofrece un clima más árido; las familias en busca de observar la naturaleza puede encontrar de todo, desde cocodrilos americanos hasta aves endémicas de esta región.

Exploradores urbanos

Para los grupos que prefieren el bullicio de las ciudades, los centros urbanos como Santiago, Puerto Plata y Santo Domingo ofrecen numerosas opciones culturales y de entretenimiento. Como la ciudad más cosmopolita de República Dominicana y también la más antigua del Nuevo Mundo, Santo Domingo ofrece tanto instalaciones modernas como un rico pasado histórico. Fundada a finales de los 1400, Santo Domingo es la ciudad primada, donde los grupos multigeneracionales pueden explorar sinuosas calles empedradas y encantadoras ruinas en la Ciudad Colonial, mientras disfrutan de una variedad de cocinas de alta gama y convenientes excursiones de un día a otras zonas del país, además de numerosas plazas, museos, música en vivo, parques y mucho más a pocos pasos en esta ciudad capital. Los alojamientos en el área van desde hoteles boutique asequibles hasta cadenas hoteleras internacionales, con casas particulares o quintas en alquiler disponibles para familias que prefieren tener su propio espacio o su “hogar lejos de casa”.